A la búsqueda de una buena lectura. Viaje dentro del portal Delibris.org
Hemos entrevistado a José Verdiá, responsable de la página www.delibris.org, un portal que ofrece un servicio de orientación a la lectura, en inglés y español. Delibris.org es una iniciativa internacional, abierta a la participación de todos los usuarios, que nace del intercambio de experiencias entre personas unidas por la misma pasión por la lectura, siguiendo una orientación cristiana.
Los libros están catalogados en categorías precisas para favorecer una consulta rápida, que se puede hacer a través de una búsqueda libre o utilizando un índice por autor o tema. La base de datos es bastante amplia, con más de 80 mil libros. El espíritu de Delibris.org es el de ofrecer al lector una valoración sobre los contenidos doctrinales y morales de los libros buscados. Las opiniones publicadas se basan en el trabajo de comentarios de un equipo de colaboradores. En muchos casos se ofrecen también breves notas que explican cuáles son los contenidos de la obra y noticias relativas al autor. Además, los títulos que han tenido mayor influencia o éxito son acompañados por comentarios más extensos y detallados.
El portal cuenta con la patrocinación delMidwest Theological Forum , una asociación estadounidense sin ánimo de lucro, que colabora con iniciativas de evangelización. José Verdiá responde a Familyandmedia sobre el espíritu y la filosofía de Delibrisi.org.
¿Qué tipo de libros son más solicitados por vuestros usuarios: ensayos, novelas, obras de filosofía?
Los usuarios, normalmente, no se dirigen a los coordinadores de la web para pedir consejos, sino que gestionan con total autonomía las propias búsquedas, a través de las ventanas de búsqueda. De esta forma todo es inmediato y directo, sin filtros o mediaciones que puedan alargar los tiempos de respuesta o de consulta. Constatamos que las novelas son seguramente la tipología de libro más buscada. Pero, naturalmente, también son buscadas obras especializadas y de carácter científico.
¿Cuántas peticiones de consulta reciben cada año y qué tipo de público tienen?
En la web Delibris.org entran unas 400 personas al día, procedentes de los cinco continentes. Si hacemos una proyección anual, el número es seguramente elevado. La mayor parte de los usuarios proceden de países de lengua inglesa y española. El servicio que ofrece Delibris está dirigido a personas de todas las edades. Los usuarios de hecho, pueden encontrar valoraciones e informaciones sobre todos los géneros de lectura, desde libros para niños hasta publicaciones especializadas de carácter científico, pasando por obras filosóficas o de simple evasión.
¿Cuál es el perfil de las personas que escriben para vosotros las recensiones y qué competencia tienen? ¿Son lectores voluntarios sin características de formación particulares o cualificados en su formación intelectual?
Como ya dicho, el portal es abierto y se alimenta de la colaboración de todos los usuarios. Tenemos un equipo de unas 30 personas que nos envían recensiones de forma continua y regular. Se trata de personas con una buena media de lectura de libros, más de 50 al año, dispuestos a poner al servicio de los otros las impresiones y las opiniones que se forman de sus lecturas. Muchos son profesores, ya sea universitarios como de escuelas superiores. Por tanto, tienen una buena preparación cultural y además, naturalmente, la pasión por la lectura y una formación católica.
Además de las indiciaciones de tipo moral o doctrinal en relación a la fe cristiana, ¿se ofrecen también orientaciones sobre la calidad literaria de las obras?
No es realmente este nuestro objetivo. Internet está lleno de páginas que realizan, y muy bien, esta tarea. Normalmente recomendamos libros con una cierta cualidad literaria o éxito en su género, dando consejos e indicaciones directamente en la página principal. A veces, en las notas incluimos informaciones breves que hacen referencia a la producción literaria del autor, indicaciones sobre su biografía o en algunos casos valoraciones sobre la calidad del libro. Sin convertirse por ello en una página de recensión literaria, que entra en la valoración de la calidad artística de la obra. Preferimos seguir siendo fieles a nuestra tarea de orientación moral y dejar a los críticos profesionales las otras evaluaciones.
¡Entonces no queda más que desear a todos una buena consulta!