La mayoría de los ‘influencers’ más seguidos en España comparte más fotos de sus mascotas que de su familia
Los investigadores Maitane Palacios y Fernando Bonete han analizado las 100 últimas publicaciones en Instagram de los 20 influencers más seguidos en España. ¿Su objetivo? Descubrir qué presencia tiene la familia en esta red social, y qué imagen transmiten sobre ella las cuentas con más tirón en nuestro país. «Muchas veces cuando los influencers hablan de familia no se refieren a la familia directa, sino a una mascota, a un proyecto personal o incluso a su comunidad de followers», señala Palacios, que trabaja como Strategic Planner en la empresa Samy Alliance.
El estudio se ha llevado a cabo con el apoyo de la herramienta Shinebuzz, con la cual han podido identificar las cuentas con más seguidores en España. De las 2.000 publicaciones analizadas, el concepto de «familia» aparece en 224. Al fijarse en quién se muestra en estas fotos, Palacios y Bonete se encontraron con que los hermanos, los padres, los abuelos u otros familiares aparecen –cada categoría– en menos del 5 % del total, pero las imágenes en que los influencers se refieren a sus perros, gatos o seguidores como su familia sí superan esta cifra.
«Resulta curioso; al no tener hijos, las mascotas se convierten un poco en este perfil», reflexiona la investigadora, que presentó los resultados del estudio este jueves, durante la jornada La familia: fundamento de la civilización que ha organizado el Instituto de la Familia CEU. Palacios destaca también que, de los 20 creadores de contenido analizados, solamente cinco tienen hijos: Laura Escanes, Paula Echevarría, María Pombo, Violeta Mangriñan y Estefi Unzu, conocida como Verdeliss y la única con familia numerosa.
La presencia de los niños
Estas cinco cuentas –el 25 % de la muestra analizada– genera el 80% de contenidos sobre familia. «La conclusión a la que llegamos es que la familia en Instagram se muestra sobre todo cuando hay niños», incide Palacios: estos son –después del influencer– el familiar que más aparece en estas publicaciones, hasta en un 55 % del total.
En este punto, se abre un debate ético en relación a la exposición de los menores, ya que el estudio destaca que el 43 % de contenidos publicitarios muestran niños. «Es un ratio altísimo de monetización de la infancia», añade Palacios. La investigadora destaca también que los perfiles masculinos estudiados –nombres como Ibai, Auronplay o TheGrefg– no son padres. «Estas cinco madres –continúa la co-autora del estudio– son la excepción que confirma la regla: cada vez tenemos hijos más tarde».
Los influencers, reflexiona Palacios, llegan a una gran masa de seguidores, por lo que están impactando con sus contenidos a muchísima gente. Así, concluye que en redes sociales «no se está mostrando algo tan natural, cotidiano y del día a día como es la familia», y lamenta que los familiares «no tengan ningún tipo de cabida en estos contenidos, a no ser que sea para monetizarlos o conseguir engagement».
La paternidad, «indispensable»
La presentación de los datos de este estudio se inscribió en una jornada en la que, a través de ámbitos como la historia, los medios de comunicación o la sociología, se puso en valor el rol de la familia como fundamento de la civilización. «La familia es lugar de acogida, de entrega y de aprendizaje, y son esas características las que hacen posible el desarrollo de la civilización», señala la directora del Instituto de la Familia CEU, Carmen Fernández de la Cigoña.
Uno de los temas centrales del evento fue la reivindicación del padre y la madre como «figuras esenciales» en el matrimonio y la familia. Para Fernández de la Cigoña, estas realidades no escapan a la influencia de una dinámica «que exalta el yo y cuestiona lo comunitario». «En la familia –añade–, la unión de un varón y una mujer va más allá de sí mismos y da lugar a una comunidad mayor, y tanto el padre como la madre tienen un papel fundamental; no enfrentados, por supuesto, sino trabajando y colaborando juntos en un proyecto común».
En concreto, Fernández de la Cigoña lamenta que la paternidad se «desdibuje» socialmente, y «difuminar su autoridad y al mismo tiempo su responsabilidad y el nexo de amor que lo encaja todo, implica ir desmoronando el que debe ser el mayor ámbito de libertad de la persona». El padre –concluye– ha de ser padre, «un papel distinto al de un amigo, un colega, un mero transmisor de normas y de conocimiento… El padre es otra cosa. Cuida, quiere, protege, apoya, enseña, educa, reprende si es necesario… y ha de hacer todo esto y ha de poder hacerlo».
Fonte: El debate
https://www.eldebate.com/familia/20221021/mayoria-influencers-mas-seguidos-espana-comparte-mas-fotos-mascotas-familia_67342.html