El silencio y la palabra
Michele Zanzucchi.
El silencio y la palabra. La luz – escucha, comunicación y «mass media». Collana Universitas, editorial Città Nuova (2012).
Sumergidos en una época dominada por la alta velocidad de las máquinas y por la invasión mediática, tendemos a dejar el silencio al margen de la experiencia cotidiana, incluso infravalorando la importancia fundamental que tiene en la economía general de los procesos de comunicación. Para dar luz a esta cuestión, Michele Zanzucchi ha escrito su último ensayo,
El silencio y la palabra. La luz – escucha, comunicación y mass media.
Un texto complejo con perspectiva interdisciplinar, que tiene «como lógica de fondo» las reflexiones de Chiara Lubich y, más en general, el pensamiento cristiano, con renovado entusiasmo ético, como punto de partida hacia un «nuevo inicio de la comunicación».
El autor es periodista y escritor, director de Città Nuova (revista mensual del Movimiento de los Focolares), profesor de comunicación y de periodismo en la Universidad Pontificia Gregoriana y en el Instituto Universitario Sophia. Teje una densa trama en torno al binomio silencio-palabra (relación de extraordinaria y fecunda consistencia antropológica); la trama tiene en la imagen -metafóricamente evocada desde el reclamo a la luz- un significativo elemento de novedad respecto a las tradicionales fronteras del debate clásico. Se trata de una vasta e interesante reflexión sobre los fundamentos, categorías y perspectivas más queridos por los profesionales del mundo de la comunicación, quienes son precisamente los principales destinatarios de este ensayo. El testo contempla los desafíos y aspectos críticos del escenario actual desde una óptica de renovación, tanto de los mecanismos internos como de las modalidades y de los contenidos.
Al igual que la palabra, el silencio es bisagra en la comunicación, no su negación o, peor todavía, un espacio vacío del que se tiene miedo y que se pretende rellenar a toda costa. El concepto evoca contextos y sentimientos múltiples, a veces en conflicto mutuo, por su vocación polisémica, su pluralidad de significados: espacio de alteridad irreducible, que exalta el valor de la escucha y de la relación; tiempo de espera y de reflexión, que prepara para la compresión; lugar de encuentro con Dios, etc. Su significado más profundo lo evoca el concepto cristiano de κένωσις (kenosis) –como ha explicado Zanzucchi en la presentación del libro en Radio Vaticana-, referido al «silencio de Dios que no es fin en sí mismo, sino que es un silencio que provoca la palabra, que genera la palabra, que permite a la palabra ser palabra».
Guía sólida y actualizada para profundizar en estos temas, el libro de Zanzucchi es al mismo tiempo un mensaje de esperanza que tiene una meta posible y deseable en la comunicación del hombre y para el hombre, fundada en la primacía del silencio sobre la palabra. Se trata de una reflexión en consonancia con el sorprendente tema elegido este año por el Papa para la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales: «Silencio y palabra: camino de evangelización». Ciertamente, una inesperada y afortunada coincidencia, pero también y sobre todo, un horizonte de sentido que necesitamos recuperar para salir del ensordecedor ruido global en el que hemos precipitado.