Educar a nuestros hijos hoy. Patrizio Romano nos cuenta la experiencia de Far-Famiglia
Hemos estado con Patrizio Romano, presidente de la asociación Far-Famiglia (Hacer Familia). La conversación, cordial y agradable, ha sido la ocasión para hablar no solo de Far-Famiglia, sino también de cuestiones sobre la educación de nuestros hijos hoy en día, la relación – a menudo difícil y controvertida- del uso de las tecnologías y de los medios en familia y de los libros.
Patrizio, a menudo escuchamos que hoy día, a pesar de las enormes posibilidades de nuestra sociedad, el proyecto educativo para nuestros hijos está en crisis. ¿Qué es y cómo se inserta Far-Famiglia en este contexto?
Far-Famiglia es un proyecto educativo dirigido a los padres que nace en España en 1991 como obra de Fernando Corominas, quien funda en Madrid el Instituto Europeo de Estudios de la Educación. Con este proyecto se quiere poner a disposición de los padres todas esas contribuciones que la pedagogía ha adquirido en los últimos años y que hacen más eficiente la acción educativa de los padres en casa. Por ejemplo, el conocimientos de los periodos sensibles (que el niño atraviesa en su desarrollo natural y que afectan a cualquier aspecto del desarrollo físico, intelectual y de los valores) permite una estimulación eficaz y oportuna que unida a un clima familiar positivo, a un conocimiento atento de la personalidad del hijo y a una motivación adecuada, consienten a los padres ser protagonistas activos en la educación.
En Italia, Far-Famiglia nace gracias a algunas familias de Brescia que en 1998 invitan a Fernando Corominas a dar los primeros cursos que después proseguirán sus más estrechos colaboradores. Desde entonces, Far-Famiglia se ha difundido en muchas ciudades de Italia, donde se tienen cursos de educación familiar. Far-Famiglia está muy difundida también en Europa, en España, Alemania y Rusia y en Estados Unidos, en México y en casi todos los países de América Latina.
¿A quién os dirigís y cuál es vuestra finalidad?
Far-Famiglia se dirige a los padres, a los profesores y a todas las personas que tienen una responsabilidad educativa con sus hijos o con menores. Nuestra finalidad principal es la de cuidar la formación de los padres como educadores y que hagan de los propios hijos personas libres y responsables, que sepan elegir el bien y sepan comprometerse para realizarlo; en otras palabras, que los hijos sean personas dotadas de una voluntad fuerte y sana.
¿Qué significa hoy educar a nuestros hijos? ¿Cuáles son los peligros, las dificultades y los riesgos?
Los peligros, las dificultades y los riesgos para las familias que quieren educar bien a los propios hijos son innumerables y están a la vista de todos: el trabajo que absorbe cada vez más a los padres hasta crear una verdadera ausencia en la familia, la falta de trabajo que arroja en el desesperanza a muchos padres, los medios de comunicación que transmiten valores contrarios al bien de las personas y en la falta de políticas familiares.
A pesar de todo esto, Far-Famiglia quiere apoyar el esfuerzo de los padres y animarles porque es posible educar bien a los propios hijos, gracias a las nuevas desarrollos pedagógicos que han traído contribuciones muy valiosas. Nuestros padres, aún beneficiándose de un contexto social más favorable a la familia, no tenían un patrimonio pedagógico tan amplio como lo tenemos nosotros hoy; ciertamente es necesario formarse bien y vale la pena porque nuestros hijos son lo mejor de nuestra vida.
Junto a la formación personal de los padres, también es necesario que las familias hagan red entre ellas, de forma que se puedan amplificar los efectos educativos positivos.
¿Qué importancia tiene la atención de los padres hacia los propios hijos en el consumo de los medios (televisión, internet, videojuegos…) en un proyecto educativo? ¿Es más importante una actitud que imponga límites o filtros (de los padres a los hijos) o la búsqueda de un autocontrol de los propios hijos?
Los medios, tan difundidos, si por un lado ofrecen muchas oportunidades, por el otro favorecen comportamientos individuales que no refuerzan la unidad familiar. Conozco personalmente a padres que proponen y realizan en casa con sus hijos un espacio que llaman el «tiempo digital» que debe ser inferior al «familiar»: quien usa el ordenador en casa marca en una tarjeta el tiempo dedicado al juego y al trabajo. He visto que este estilo ayuda a los padres a acompañar a los hijos en el uso eficaz y consciente de estas tecnologías, apoyado naturalmente también por los filtros adecuados.
¿Algún libro para aconsejar a nuestros lectores?
Ciertamente: los libros Educar hoy y Cómo educar la voluntad explican ampliamente el proyecto educativo de Far-Famiglia. El lenguaje es sencillo y directo y, junto a los principios pedagógicos, hay ejemplos y diálogos que los hacen concretos.
Hay libros que, por edades, ayudan a los padres a realizar una educación eficaz y oportuna, de la infancia y de la adolescencia.
Finalmente, hay libros para la pareja que hacen descubrir las enormes potencialidades encerradas en la relación conyugal (Matrimonio y felicidad y La comunicación en familia).
Característica de cada libro, finalmente, es la presencia de guías de trabajo que ayudan a los padres a ser concretos en sus esfuerzos educativos. Para quien quiera profundizar en el tema, aconsejamos el siguiente link http://www.farfamiglia.it/libri/catalogo.php.