Enrique Fuster
Elegir una película 2012 (eds. Armando Fumagalli, Luisa Cotta Ramosino), Ediciones Ares, Milán 2012.
Cinematográficamente hablando, la temporada pasada será recordada como la de los super héroes: Capitán América, Los Vengadores, Batman, Spiderman… y quizá se podrían incluir aquí Misión Imposible IV y Sherlock Holmes II, entre los grandes éxitos junto a la primera temporada de la nueva saga destinada a jóvenes, Hunger Games; todos ellos son producciones de aventuras con alto nivel de adrenalina que ofrecen historias de gran impacto emotivo, sin dejar de lado los valores.
Pero este año, el cine americano ha ofrecido también películas comprometidas y ambiciosas, entre las que se encuentran Los idus de marzo (sobre el mundo de la política y sus compromisos), Margin call (apasionante historia de los orígenes de la crisis económica mundial), Moneyball (historia basada en hechos reales del mundo del baseball) o Criadas y Señoras ( que recurre a una experiencia personal para contar la batalla contra el racismo en los años 60). Así lo explican Armando Fumagalli y Luisa Cotta Ramosino en la introducción de Elegir una película, que recoge los títulos más significativos de septiembre del 2011 a junio del 2012. El libro va a gustar a todos los amantes del cine, pero será especialmente útil a los organizadores de cine forums en contextos educativos (escuelas, grupos de jóvenes, asociaciones, parroquias, etc.) y a los padres que quieren elegir películas para disfrutar en familia.
Según los autores, a nivel europeo no han faltado las sorpresas. Buen ejemplo de ello han sido las dos grandes francesas The Artist e Intocable, pero también muchos otros títulos muy interesantes tanto desde el punto de vista artístico como del de los valores: Le Havre, del finlandés Kaurismaki;Sister, de la suiza Meier; Todos nuestros deseos y Declaración de guerra, de los franceses Lioret y Donzelli respectivamente, o la coproducción El primer hombre, de Gianni Amelio, “conflictos ‘pequeños’ pero preciosos contados en historias de una humanidad tocada por el dolor pero que no pierde la esperanza”. Otros títulos destacables: el argentino Un cuento chino, ganador del premio de crítica y público en el Festival de Roma que no duró mucho en las salas y que “merece recuperar la mirada inteligente y positiva que lanza sobre el hombre”, y la iraní Una separación, ganadora del Óscar a la mejor película extranjera. Por otra parte, en un año huérfano de los productos de Pixar, no han faltados los dibujos animados capaces de unir a padres e hijos, comoArthur Christmas: Operación regalo y El castillo en el cielo, otra obra maestra del genio de Miyazaki.
En Italia, por el contrario, asistimos a un retroceso en términos de taquilla pero sobre todo en ideas y capacidad de renovación. Según los autores del volumen, “los títulos que han atraído al público han sido nuevas versiones (remakes) de conceptos ya utilizados, como Bienvenidos al Norte o Inmaduros 2 – El viaje, que poco o nada añaden a los originales”. La excepción es César debe morir, de los hermanos Taviani, expresión de un cine de compromiso civil, fascinante y potente con un reparto formado por presos, que ha ganado el Festival de Berlín.
Desde 2004, la editorial italiana Ares publica este volumen anual, dirigido a un público inteligente y abierto pero no especializado. Las películas están valoradas de una a cinco estrellas, teniendo en cuenta los méritos de contenido y los aspectos formales. Las reseñas están cuidadas y bien escritas. Sirven para orientar la elección y a la vez ayudan a reflexionar sobre las películas ya vistas, todo ello mérito de un grupo de jóvenes y competentes redactores, compuesto por guionistas, story editors, profesores, estudiosos de la materia.
Los criterios que guían su trabajo son, sobre todo, la importancia atribuida a la fuerza narrativa de la película, teniendo en cuenta la historia, los personajes y los valores de los que la historia se hace portavoz, todo ello desde un punto de vista arraigado en la antropología cristiana. Resultan de gran utilidad tanto las indicaciones explícitas sobre los elementos problemáticos (escenas eróticas y/o desnudos, de violencia, de terror, lenguaje vulgar, indulgencia sobre el uso de las drogas o sobre el uso desmedido de alcohol, etc.). También tienen interés los anexos al final del volumen, con listas de las mejores películas para todos, para los más jóvenes, para un debate… Es verdad que las recensiones de Elegir una película aparecen “en preestreno”, antes de ser publicadas, en la web www.familycinematv.it pero merece la pena tener todas a mano, en el libro, para no perderse
nada.
